miércoles, 23 de enero de 2008

Voilà l'image

"Primer plano, primer primerísimo plano, imágenes bien logradas, fotos hermosísimas" términos totalmente desconocidos para mí hasta el momento. Con poca experiencia en el manejo de una cámara, de la luz, de los enfoques, tuve una deliciosa experiencia tratando de robarle a la naturaleza alguna imágen que se ajustara a los parámetros que nos sugirío el profesor. No fue una tarea fácil. Un día tuve que esconderme detrás de una mata como media hora para tomarle una foto a un pájaro comiendo mango. En otra ocasión, me acosté en el piso para tener un mejor ángulo del objeto, cuando me levanté descubrí que me había manchado la blusa. Y muchas, muchas veces, tomé fotografías a escondidas, bien porque estaba prohibido en el lugar o bien porque lo hacía sin el permiso de las personas a las que fotografié. Al final, pude darme cuenta de la riqueza de contenido que hay en la imagen, del valor que tiene asistir a una exposición y contemplar el trabajo del artista, de la herramienta didáctica que hay en la imágen y que pocas veces nos atravemos a usar.

La lectura y la creación de la imágen, a mi modo de ver, demandan del lector y del autor una capacidad de interpretación e imaginacón mucho más grande que la utilizada en los textos escritos. La imágen está en la obligación de sintetizar, de jugársela toda en una sola página, en un solo afiche, en una sola portada, en una sola ilustración.